La Biblioteca Nacional y La Nave de los Sueños presentaron:
El retrato postergado, de Andrés Cuervo
Gira en torno a la relación que tuvo el
escritor Haroldo Conti con un joven realizador cinematográfico llamado
Roberto Cuervo, a mediados de la década del 70. Haroldo recorre un
período de viraje estético, en el que pasa de una literatura
costumbrista a otra de alto compromiso político, cuando entabla amistad
con Roberto quien comienza a filmarlo para componer un “retrato humano”.
Durante los años de la última dictadura argentina Haroldo es
secuestrado y asesinado, sin conocerse aún datos de su destino ni del de
sus restos.
Reseña de nuestra función
Haroldo
Conti y un retrato de familia
Hay fotos, una máquina de escribir que
empieza a teclear, una soga que la anuda y que la vuelve a soltar.
Palabras,
las de Conti, Martha Lynch y Eduardo Galeano. Y más imágenes en movimiento que
muestran a Haroldo en su casa.
El detrás de cámara reconstruye una historia de
literatura, de principios y de familia.
La Nave de los Sueños presentó el
documental “El retrato postergado” de Andrés Cuervo, que integra todo esos
elementos en su ópera prima, y con él hablaron Gabriel Patrono y Miguelius
antes de la función.
¿Cómo era tu relación con la obra de
Haroldo Conti antes de la realización de la película?
-La historia de esta película es sobre un
material que empezó mi papá cuando era muy joven, él era estudiante de cine y
quería filmar un cuento de Haroldo, se hacen amigos y lo empieza a filmar. Ese
proyecto se interrumpe porque no había fílmico, pero mi papá decide seguir
filmándolo, para hacer un retrato humano. La dictadura (de 1976) secuestra y
asesina a Haroldo, después mi papá muere en un accidente, y mi mamá se queda con
todo ese material escondido en un ropero durante un montón de años. Yo siempre
supe de la existencia de ese material, y en cierta forma condiciona que yo
quiera estudiar cine, además siempre hubo una necesidad de terminar esa
película. Por eso me acerqué a Haroldo desde pibe, a leer sus cuentos, y además
él era de Chacabuco y los cuentos son muy regionales, de su pueblo, y eso fue
lo primero que me enganchó.
¿En qué momento te pusiste en contacto con
el material?
-Lo pude ver en el año 83, que mi mamá le
dio el material a Marcelo Conti, el hijo de Haroldo, para hacer proyecciones en
homenaje a su padre, y ahí circuló bastante. Estaba en 16 mm y el audio en unos cassettes
TDK muy viejos, había perdido mucho en calidad. De todas formas hay muchas
horas de grabación de Haroldo, Martha Lynch y Eduardo Galeano que eran sus
mejores amigos en ese momento, y en base a estos tres testimonios armé la
película.
¿Cuándo decidiste hacer el documental?
-Cuando empecé la carrera ya tenía esta
idea de terminarlo. Hice varios intentos infructuosos por obtener financiación,
y reescribí el guión un montón de veces. Y en el 2008 me presento al Instituto
de Cine, a una vía digital, y obtengo el subsidio que me permite armar el
equipo técnico para llevar a cabo la concreción de la película. En 2009 fue el
estreno, en esta misma sala. Después fue al Gaumont, a los espacios INCAA, al
Festival de La Habanna, y estuvo en el de Gualeguaychú.
¿Cómo fuiste trabajando el material de
acuerdo a lo que querías hacer?
-Yo tenía idea de poner un montón de cosas
que a mí me gustaban. Era esta experiencia de la ópera prima y decir, es mi
primera película, quiero hacer animación, quiero hacer stop motion, etc. Pensé que
quería hacer la película que era la historia de mi papá, y de paso que sea mía,
que sea completamente personal.
En esa búsqueda encontré gente como Jorge
Crespo, el fotógrafo de la película, que me ayudó en todo eso que yo quería ver
y cómo lo poníamos en esa cajita, en el encuadre. Con Darío, el músico,
trabajamos un montón con el archivo primero, y le pedí que compusiera algo
autóctono, hay un triste, una zamba, una baguala, que lo fusionamos para hacer
música de cine, hicimos un cruce un poco difícil con Stophouse pero quedó bien.
¿Qué repercusiones tuviste después del
estreno?
-Sobre todo en lo personal, era un laburo
muy mío, la idea era terminarlo y que siguiera su camino. Y muchas de las
devoluciones que tengo me sirven en ese sentido, porque la gente viene y me
dice lo que ve y entiende, y es genial ese ida y vuelta.
¿Cuáles son tus próximos proyectos?
-Estoy trabajando con una película de
ficción documental con Juan Doffo, un artista plástico que hizo un museo en un
pueblo que tiene muy pocos habitantes que se llama Mechita. Está entre Bragado
y Alberdi, y Doffo abre un museo en ese lugar con obras muy importantes de
amigos suyos.
¿Formás parte de alguna agrupación de
documentalistas?
-A partir del cambio tecnológico del cine
digital se puede con mucha más facilidad llevar a cabo una película, y un
documental con más razón porque tiene menos presupuesto. Y es bueno que esa
gente se nuclee de alguna forma para poder trabajar en equipo, y poder reclamar
de forma más firme la presencia del documental en todo lo que es el área cinematográfica.
Yo hace dos años que formo parte de ADN (Asociación de directores y productores
de cine documental) y ahí conocí gente que le gusta mucho el cine, que trabaja
muchísimo, que está siempre actualizada y son muy claros y muy compañeros al
explicarte cuál es la mejor forma para llevar a cabo tu película.
Si, como se lo escucha a Haroldo en los
primeros segundos del documental, “la vida es una especie de borrador que uno
nunca termina de pasarla en limpio”, Andrés retoma tres historias, la del
escritor, la del cineasta y la suya propia para reescribirlas y hacerlas una
sola, más allá de los borrones.
Daniela
Pereyra
Ficha
técnica:
Guión,
producción y dirección: Andres Cuervo. Jefe de producción: Mariano Gerbino.
Asistente de dirección: Gonzalo Cánovas. Ayudante de dirección: Gabriel Rosas.
Sonido: Matias Novelle. Dirección Artística: Natalia Gregorini. Fotografía:
Jorge Crespo. Edición: Emiliano Serra. Música: Darío Barozzi. Animador: Parche
films. Interpretes: Haroldo Conti, Eduardo Galeano, Martha Lynch. Realizada con
el apoyo del I.N.C.A.A. Distribuida por Rumba Cine.
Andrés Cuervo estudió Diseño de Imagen y Sonido en la U.B.A. Trabajó en Tv como camarógrafo y luego como productor, director y guionista. Miembro de A.D.N. Asociación de documentalistas de la nación. El retrato postergado es su primer largometraje.
¡¡¡ Gracias por venir !!!
La Nave de
los Sueños - Gestión y producción cultural.
Dirección: Gabriel Patrono.
Programación: Gabriel Patrono y José Ludovico. Producción y contenidos:
Guillermina Polimante, Daniela Pereyra, Noelia Soledad Gómez, Daniela Caballero,
Giuliana Trucco. Prensa: Leandro Frias.
Maestro de ceremonias: Mr.
Miguelius.
Contacto: LA NAVE DE LOS
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